Celso Calfullan. Comité por una Internacional de Trabajadores, CIT.
Lo que hemos visto desde que sacaron a Pedro Castillo del gobierno son permanentes asesinatos contra el pueblo peruano, pero lo más criminal ha sido lo que sucedió este lunes 9 de enero con las protestas en Puno, donde las fuerzas represivas asesinaron a 17 ciudadanos en Juliaca, entre ellos un menor de edad los criminales que están en el gobierno quieren hacer pasar estos asesinatos como “enfrentamientos” y no como lo que realmente es, asesinatos sangre fría contra el pueblo.
Los peruanos han salido a las calles y carreteras a exigir la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, junto con el cierre del Congreso y la necesidad de llamar a nuevas elecciones.
El pueblo peruano se encuentra enardecido porque consideran que el Gobierno actual ha intentado deslegitimar su protesta aduciendo todo tipo de justificaciones, entre otras que son “terroristas” y “delincuentes”, cuando realmente los delincuentes y terroristas están en las esferas del poder.
Es demasiado evidente que el gobierno y el Congreso peruano no están respetando los derechos humanos de los ciudadanos que tienen el legítimo derecho de salir a protestar contra todos los políticos corruptos de ese país y sus políticas anti-democráticas.
El gobierno de Dina Boluarte y sus secuaces se siguen aferrando al poder y con esto provocando todavía más represión y asesinatos entre los peruanos.
Las enormes y masivas movilizaciones en Perú exigen la disolución del Congreso, y la convocatoria a nuevas elecciones para una Asamblea Constituyente, junto con demandar la libertad inmediata del presidente Pedro Castillo. El rechazo es rotundo contra el gobierno golpista de Boluarte que lleva casi medio centenar de manifestantes asesinados.
Las protestas masivas de los trabajadores, los pobres e indígenas en Perú contra el gobierno de Dina Boluarte no tienen la menor intención de decaer, todo lo contrario como podemos ver en las redes sociales, en las redes informativas informativas alternativas se siguen masificando por todo el territorio.
La elección de Castillo el 2021 fue un golpe duro para la clase dominante y los ricos en Perú y desde ese momento que han intentado en numerosas ocasiones derrocar a su gobierno, hasta que por fin lo lograron.
La élite gobernante lo ha querido fuera del cargo desde que fue elegido. El Congreso es un organismo corrupto y antidemocrático en manos de los partidos pro-capitalistas de la derecha y de la clase dominante.
Es una vergüenza que el gobierno chileno encabezado por Boric y unos supuestos “progresistas” que son parte de su gobierno no condenen los asesinatos y las violaciones de los derechos humanos de nuestros hermanos peruanos.
Desde Chile los militantes del Comité por una Internacional de Trabajadores, CIT, envían su solidaridad y apoyo a los trabajadores, sectores populares y los indígenas del Perú y exige el fin de la represión y el estado de excepción. No se puede permitir que se siga masacrando a un pueblo peruano desarmado.
Fuera el gobierno de Boluarte por una Asamblea Constituyente Revolucionaria y un gobierno de los trabajadores, los pobres y pueblos indígenas para poner fin al capitalismo y la enorme desigualdad existente en nuestros países.