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Narcotráfico y delincuencia

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Hugo Rodríguez

Socialismo Revolucionario. CIT en Chile.

En las últimas décadas, Chile ha enfrentado desafíos crecientes relacionados con el narcotráfico y la delincuencia, fenómenos que no solo afectan la seguridad ciudadana, sino que también reflejan profundas desigualdades estructurales en la sociedad. Estos problemas no pueden entenderse aisladamente, sino como expresiones de las contradicciones del sistema capitalista, donde la desigualdad, la explotación y la falta de acceso a recursos básicos generan condiciones propicias para la proliferación del crimen organizado y la violencia.

Si bien es verdad, que el estado chileno ha implementado diversas acciones para combatir este flagelo social, debemos decir también que, las políticas siempre son reactivas y no preventivas,

Se han desarrollado programas de prevención y rehabilitación, dirigidos a reducir la demanda de drogas y ofrecer alternativas a las comunidades vulnerables.

Se han dictado leyes y endurecido las penas para castigar a los culpables del narco tráfico y delincuentes

Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, los resultados han sido limitados. La presencia de drogas en las calles, la violencia vinculada a las bandas y la persistencia de delitos relacionados con el narcotráfico evidencian que las políticas tradicionales, centradas en la represión y la penalización, no abordan las raíces estructurales del problema.

Si el combate al narcotráfico y la delincuencia no tiene un enfoque y análisis profundo de las causas que generan estos problemas, toda la lucha será en vano.

El capitalismo, con su lógica de acumulación y concentración de riqueza, produce desigualdades extremas que marginan a amplios sectores de la población, creando condiciones propicias para que surjan actividades ilícitas como una forma de supervivencia o de búsqueda de recursos.

Por ello, el enfoque debe ir más allá de la mera represión y centrarse en transformar las condiciones sociales y económicas que alimentan el ciclo de pobreza, exclusión y desigualdad.

Debemos entender que el crimen organizado, no son simplemente unas bandas de delincuentes. Son verdaderas organizaciones que controlan territorios, tienen infraestructuras, vehiculos, penetran los organismos del estado, corrompiendo a las policias, municipios y también tienen influencias en el mundo financiero para lavar el dinero que generan.

Ahí donde el estado no está presente, es terreno fertil que ocupa el crimen organizado.

 

¿Que debería hacerse?

 

  1. Reducción de desigualdades sociales y económicas: Implementar políticas que aseguren acceso universal a educación, salud, empleo digno y vivienda. La pobreza y la falta de oportunidades son caldo de cultivo para la participación en actividades ilícitas.

 

  1. Control democrático de los recursos: Promover una distribución más equitativa de la riqueza, cuestionando la concentración del capital en manos de unos pocos. Esto puede incluir reformas tributarias progresivas, nacionalización de recursos estratégicos y fortalecimiento de los servicios públicos.

 

 

  1. Transformación del sistema productivo: Fomentar una economía que priorice el bienestar social y ambiental, en lugar de la maximización de beneficios a corto plazo. La economía social y solidaria puede ofrecer alternativas sostenibles y justas.

 

  1. Participación comunitaria y control social: Impulsar la organización popular y la participación activa de las comunidades en la toma de decisiones, fortaleciendo las redes de apoyo y control social que puedan prevenir la violencia y el crimen

 

 

  1. Desmantelamiento del sistema de producción y distribución de drogas: En lugar de centrarse únicamente en la interdicción, se debe abordar la demanda y el mercado, desmantelando las redes de producción y distribución, y promoviendo políticas de reducción de daños y atención integral a las personas afectadas

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