Por Celso Calfullan. Comité por una Internacional de Trabajadores, CIT.
El 21 diciembre de 1907 fueron masacrados miles de trabajadores salitreros en la Escuela Santa María de Iquique ¿Cuál fue su crimen? Exigir condiciones de vida un poco más humanas, la respuesta del gobierno de la época, de los capitalistas fue esta represión brutal contra los trabajadores y sus familias.
Lo más brutal de todo esto es que esta es la única respuesta que sabe dar la clase dominante cuando los trabajadores exigen condiciones mínimas de vida para ellos y sus familias, como lo explico muy bien el historiador Gabriel Salazar en Chile llevamos 23 masacres de trabajadores perpetrados por la clase dominante y sus fuerzas armadas.
La masacre de la Escuela Santa María de una u otra manera sigue siendo un “símbolo” de lucha y resistencia de la clase trabajadora especialmente durante el siglo XX, los mártires de la clase trabajadora no han sido olvidados a más de cien años de ocurridos estos crueles acontecimientos.
La huelga de los obreros de las salitreras estalló el 10 de diciembre en la oficina San Lorenzo, huelga que se extendió rápidamente. Solo cinco días después, una columna de más de dos mil obreros caminó a Iquique en demanda de mejoras salariales y mejores condiciones de trabajo. Numerosos gremios de Iquique se sumaron al movimiento huelguístico. De acuerdo a estimaciones de la época, los huelguistas eran entre 15 mil a 23 mil personas, lo que implicó que tanto las actividades del puerto, como la producción minera de toda la región, quedaran paralizadas íntegramente.
Los capitalistas, la patronal que controlaba las compañías salitreras se negaron a negociar con los representantes de los trabajadores y exigieron al gobierno capitalista de turno reprimir la movilización de los trabajadores. La intervención del gobierno fue absolutamente confrontacional, el ministro del Interior de la época Rafael Sotomayor dio la orden de prohibir las reuniones e impedir la llegada de nuevos huelguistas hasta Iquique y junto a otras autoridades locales dieron la orden a los trabajadores de abandonar la ciudad el día 21de diciembre, dejando claro que usarían la “fuerza” para desalojarlos. Para ese momento el puerto de Iquique ya se hallaba copado por una numerosa tropa de militares, junto a tres buques de guerra.
Los trabajadores se negaron a aceptar la orden de desalojar la Escuela Santa María y el 21 de diciembre el general Roberto Silva Renard ordenó a sus tropas abrir fuego en contra de miles de huelguistas salitreros que se encontraban en el lugar. Finalmente miles de trabajadores desarmados fueron asesinados por el “valiente” ejército chileno.
La clase dominante tiene manchadas sus manos con la sangre de miles de trabajadores chilenos. Esta es la razón por la que este sector quiere esconder la historia, porque ella contiene mucho de su pasado criminal, les interesa que la gente se olvide de estos crímenes para volver a repetirlos en el futuro cuando ya no puedan seguir engañando a la gente con sus mentiras.
Honor y gloria a todos los mártires de la clase trabajadora, arriba las y los que luchan.
