Por Celso Calfullan.
Hoy estamos viendo como de nuevo la elite, los empresarios y la derecha están impulsando un discurso racista y de odio contra los mapuche.
Históricamente la elite, la clase dominante siempre defendió un discurso racista contra los mapuche, los presentaban como borrachos, flojos e incluso decían que eran hediondos, entre otras estupideces ¿Cuál era el fin que perseguían con este discurso? Básicamente lo que buscaban era tener una justificación para poder robarles sus tierras.
Esta política viene desde que llevaron a cabo lo que en los libros de historia de este país se conoce como “Pacificación de la Araucanía”, que según ellos era para llevar la “civilización” y la “cultura” a todo ese territorio de “salvajes”.
La forma en que se acumularon las mayores fortunas en Chile, fue precisamente en base al robo y el despojo del territorio a los mapuche.
La elite de este país se hizo en base al robo de las tierras de los mapuche, hurto que siguen cometiendo hasta estos días, no solo de los pueblos indígenas, ahora le roban a todos los habitantes de este país, nos roban con el precio de los medicamentos, de los pollos, de los supermercados, incluso con el precio del papel higiénico y ahora se acaba de descubrir que nos están robando con el precio del gas, escandalo de la empresa Metrogas.
La campaña racista y de odio contra los mapuche hoy apunta a otros temas, ahora se los quiere relacionar con el robo de la madera, el narcotráfico y el terrorismo, una campaña que es promovida desde el Mercurio a la radio Bio-Bio, pasando por todos los medios de comunicación que en su gran mayoría son controlados por los grandes grupos económicos.
¿Qué persigue esta campaña? Primero que nada crear un ánimo adverso en contra de las justas demandas de los mapuche, que persiguen recuperar una parte de todos los territorios que les fueron robados, por el estado chileno, los colonos extranjeros y ahora por las grandes empresas forestales y de la madera, para poder llevar a cabo una segunda “Pacificación de la Araucanía”, con todo el contenido criminal que esto tiene.
Lo ideal para los empresarios y la derecha es que esto lo lleve a cabo un gobierno supuestamente “progresista” y de “izquierda”, como dice el dicho popular “sacar las castañas con la mano del gato”.
Ahora hay que decir que no es descartable que un gobierno como el de Boric lleve a cabo una represión brutal como la que tenía planificado el gobierno de Piñera, pero que no pudo llevar a cabo por el alto nivel de apoyo que tiene la causa mapuche entre la población, como quedó demostrado en octubre de 2019, con las miles de banderas mapuche enarboladas durante el estallido social. Por otro lado no podemos olvidar que los parlamentarios del Partido Socialista que son parte de este gobierno están a favor de llevar a cabo una represión aún más brutal de la ya tenemos en la Araucanía.
Para poder llevar a cabo sus planes criminales, lo primero que necesitan hacer es tratar de quebrar el apoyo que tiene la causa mapuche entre amplios sectores de la población.
Este es el objetivo final que tiene la campaña racista y de odio que está en marcha contra el pueblo mapuche.