Celso Calfullan.
Comité por una Internacional de los Trabajadores, CIT.
En Chile en los últimos meses hemos visto casi por una cadena nacional permanente el tema del caso Monsalve, parece que para los medios de comunicación solo existe este caso en Chile. El Senador Insulza en una entrevista en la Radio U. de Chile dijo que “El Mercurio es el diario de Monsalve” dado que para ese periódico solo existe este tema.
El Mercurio es el que entrega la línea editorial para todos los otros medios de comunicación en Chile, tanto para la televisión, como las radios. Todo esto lo pueden llevar a cabo dado que los empresarios y la derecha controlan el 100% de los grandes medios de comunicación de este país, los principales periódicos, los canales de televisión y una amplia mayoría de las radios.
Parece que para los empresarios este es un gran negocio, por eso mismo invierten cifras millonarias para controlarlos. Por ejemplo durante 2017 Luksic dueño de canal 13 de televisión tuvo pérdidas por 17 mil millones y en abril de 2024 Max Luksic dijo que “Logramos nivelar la situación económica” (de canal 13) ahora solo pierden en promedio 15 mil millones por año. No deja de ser raro que los empresarios no les importe perder tanta plata por estos “negocios”, son tan “generosos” que están dispuestos a perder plata para mantenernos “informados”.
Pero detrás de toda esa inversión se esconde otro objetivo, aparentemente solo están interesados en manipular la información para defender sus intereses de clase. Lamentablemente la manipulación de las noticias llega a un nivel realmente inverosímil, según una encuesta Cadem de fines de 2023 un 27% de los encuestados piensa que vivimos bajo un régimen comunista ¿Si esto no es manipulación? Pensar esto en Chile es realmente ridículo, dado que este país es uno de los países más neoliberales del mundo. Neoliberalismo entendido como un capitalismo depredador y saqueador llevado a niveles extremos.
La manipulación y el aprovechamiento político son demasiado evidente, para lograr esto los empresarios y la derecha necesitan controlar la mayoría de los medios de comunicación y poder manejarlos a su antojo.
El caso Monsalve es grave, una violación es algo extremadamente grave, pero más grave aún es como se ha usado este caso para ocultar el caso Hermosilla (caso audios) o los casos de corrupción en los municipios, para los medios de comunicación estos casos no existen. Andrés Chadwick ha declaro en dos oportunidades como imputado en el caso audios-Hermosilla, pero esto no ha sido noticia para los grandes medios de comunicación, como mínimo debemos decir que esto es “sospechoso”.
El caso Hermosilla sin lugar a duda es lo más grave que ha pasado en los últimos años, dado debido a este caso salió a la luz amplias redes de corrupción en todos los niveles del Estado, incluyendo el sistema judicial y sus nexos con los empresarios.
La derecha y los empresarios nos machacan permanentemente a través de la televisión y las radios, dado que ellos son los que deciden que “noticias” deben ser difundidas. Queda claro es que sin medios de comunicación libres e imparciales, la elite dominante seguirá manipulando a la mayoría de la población.
El sistema capitalista está completamente podrido, está claro que no podemos tener ninguna confianza en este sistema. No podemos esperar que los cambios que necesita la clase trabajadora vengan desde arriba, los cambios se deben gestar desde abajo, desde los propios trabajadores y sus organizaciones.
